MOVIMIENTOS EN MASA Y ESTABILIDAD DE TALUDES NATURALES
LOS DESLIZAMIENTOS
Son desplazamientos de masas de tierra o rocas por una pendiente en forma súbita o lenta. El deslizamiento o derrumbe, es un fenómeno de la naturaleza que se define como “el movimiento pendiente abajo, lento o súbito de una ladera, formado por materiales naturales - roca- suelo, vegetación-o bien de rellenos artificiales”. Los deslizamientos o derrumbes se presentan sobre todo en la época lluviosa o durante períodos de actividad sísmica.
Existen dos tipos de deslizamientos o derrumbes.
Deslizamientos lentos.- Son aquellos donde la velocidad del movimiento es tan lento que no se percibe. Este tipo de deslizamiento genera unos pocos centímetros de material al año. Se identifican por medio de una serie de características marcadas en el terreno.
Deslizamientos rápidos.- Son aquellos donde la velocidad del movimiento es tal que la caída de todo el material puede darse en pocos minutos o segundos. Son frecuentes durante las épocas de lluvias o actividades sísmicas intensas. Como son difíciles de identificar, ocasionan importantes pérdidas materiales y personales.
¿Por qué ocurren?
Depende de las siguientes variables: Clase de rocas y suelos; Topografía (lugares montañosos con pendientes fuertes); Cantidad de lluvia en el área; Actividad sísmica; Actividad humana (cortes en ladera, falta de canalización de aguas, etc.); Erosión (por actividad humana y de la naturaleza). Los deslizamientos o movimientos de masa no son iguales en todos los casos.
¿Cuándo hay mayor peligro de deslizamientos?
Sólo con estudios específicos se puede determinar la potencialidad por deslizamiento de una zona determinada y establecer cuáles medidas deben tomarse para evitar o reducir que el fenómeno ocurra. Sin embargo sabemos que en las temporadas invernales el peligro aumenta.
HUNDIMIENTO DE SUELOS
Un hundimiento de suelo es un movimiento de la superficie terrestre en el que predomina el sentido vertical descendente y que tiene lugar en áreas aclinales o de muy baja pendiente. Este movimiento puede ser inducido por distintas causas y se puede desarrollar con velocidades muy rápidas o muy lentas según sea el mecanismo que da lugar a tal inestabilidad. Si el movimiento vertical es lento o muy lento (metros ó centímetros / año) y afecta a una superficie amplia (km2) con frecuencia se habla de subsidencia. Si el movimiento es muy rápido (m/s) se suele hablar de colapso.
Las causas de la subsidencia pueden ser, entre otras:
- La respuesta de los materiales geológicos ante los esfuerzos tectónicos.
- Las variaciones en el nivel freático o en el estado de humedad del suelo, por ejemplo como consecuencia de la explotación de acuíferos.
- La actividad minera subterránea, por ejemplo tras el abandono de galerías subterráneas.
Por su parte, las causas de los colapsos implican el fallo de la estructura geológica que sostiene una porción del terreno bajo el cual existe una cavidad, lo que puede venir motivado por la disolución de las rocas hasta el límite de la resistencia de los materiales o el vaciado de acuíferos o en general el debilitamiento por meteorización física o química de una estructura que alberga una cavidad. El aprovechamiento de los recursos naturales (actividad minera, explotación de acuíferos) también puede inducir colapsos.
Los hundimientos son comunes en donde la roca que existe debajo de la superficie es piedra caliza, roca de carbonato, tiene capas de sal o son rocas que pueden ser disueltas naturalmente por la misma circulación del agua subterránea. Al disolverse la roca, se forman espacios y cavernas subterráneas.
La apariencia de los hundimientos es impresionante porque la tierra se mantiene usualmente intacta por cierto tiempo hasta que los espacios adentro de la tierra subterránea se hacen demasiado grandes para seguir dando suficiente apoyo a la tierra de la superficie. Si no se cuenta con suficiente apoyo para la tierra que se encuentra sobre los espacios y cavernas subterráneas, entonces puede ocurrir un colapso súbito en la tierra.
DERRUMBES
Los problemas que presenta la inestabilidad de las laderas de las montañas, son uno de los peligros naturales más destructivos del planeta.
Derrumbes, deslizamientos, flujos, reblandecimiento de terrenos y movimientos complejos ocurren día con día en cualquier parte del mundo de tal forma que cada año las víctimas y los daños materiales son incalculables. Este tipo de eventos puede originarse, por terremotos, lluvias intensas, descongelación de la nieve, pero el principal riesgo son los asentamientos humanos sobre minas de arena, en las laderas de las montañas que presentan diferentes grados de inclinación o por vivir al pie de ellas. Los mecanismos básicos de inestabilidad del terreno son: los caídos o derrumbes, los flujos, deslizamientos y las expansiones o desplazamientos laterales de los terrenos. Los caídos o derrumbes, son movimientos repentinos de suelos y fragmentos aislados de rocas que se originan en pendientes abruptas u acantilados, por lo que el movimiento es de caída libre, rodando y rebotando y suelen presentarse mayormente en las carreteras.
DESPRENDIMIENTOS DE ROCAS
El desprendimiento de rocas que se caracteriza por la caída libre de rocas desde un acantilado. Estas generalmente se acumulan en la base del acantilado formando una pendiente, lo que impone una amenaza adicional. El desprendimiento de rocas obviamente constituye un peligro para los seres humanos y la propiedad, pero en general, impone una amenaza localizada dada su limitada área de influencia.
SOLIFLUXION
La solifluxión (flujo de suelo) consiste en un desplazamiento que afecta a una masa de fango desplazada sobre un basamento estable. Afecta únicamente a los materiales arcillosos susceptibles de transformarse en fango por el aumento de su contenido en agua líquida, lo que provoca un cambio de densidad, del peso y del volumen, que favorece el desplazamiento a lo largo de la pendiente. Al transformarse en fango, la propia lámina que se desplaza colmata los huecos y suaviza las irregularidades de la pendiente, lo que reduce la resistencia del sustrato al desplazamiento. Cuando se alcanza el límite de fluidez en los niveles superficiales se establece un plano de discontinuidad hídrica que funciona como plano de cizalla. La actuación del agua puede producirse por el empapamiento del material deleznable a causa de infiltraciones, o el desbordamiento de mantos freáticos, o por la abundancia de las precipitaciones en una zona.
Existen diferentes tipos de solifluxión, pero las dividiremos en dos: la generalizada y la localizada.
La solifluxión generalizada afecta a toda una ladera y en procesos, normalmente, lentos y sostenidos a lo largo del tiempo. En esta modalidad distinguimos:
- La solifluxión laminar, que afecta a una capa muy superficial en un proceso de descenso muy lento.
- La solifluxión subcutánea, que está dificultada por la existencia de un manto vegetal, y que produce abombamientos en dicho manto. Estos abombamientos pueden rasgar el tapiz dejando escapar el fluido fangoso.
- La solifluxión en terracillas, propia de la grandes pendientes, donde el movimiento se descompone en pequeños deslizamientos escalonados, expresados en peldaños discontinuos de altitud y anchura de dimensiones decimétricas. Asemejan a pequeños senderos escalonados. Esta solifluxión se ve acentuada por las pisadas de los animales mayores, por lo que esos peldaños, cuando aparecen aislados, también se llaman pisada de vaca. Frecuentemente las terracillas superiores cabalgan sobre las inferiores.
La solifluxión localizada se caracteriza en lugares determinados, y también en momentos concretos, lo que provoca fenómenos catastróficos. En este fenómeno distinguimos:
- El nicho de solifluxión, zona de despegue delimitado por un talud semicircular abrupto, con forma de cuchara.
- La colada de solifluxión, o colada de barro, cuando el material desplazado se extiende a lo largo de la pendiente en forma de lengua espesa y ondulada. En la parte final adopta bien una forma cónica plana, si es muy fluido, o bien se acumula el material en la parte delantera formando caballones.
- Los caballones o lóbulos de solifluxión, se forman cuando el material se acumula en la parte inferior formando una pequeña contrapendiente. Los caballones tienen forma convexa y detrás suyo dejan una depresión donde se acumula agua. En el recorrido de la lengua fangosa queda una cicatriz con una pendiente marcada. Los caballones presentan un perfil claramente escalonado.
ALUVIÓN:
Un aluvión se define como un río de barro originado tras una fuerte lluvias o deshielo que ocasionan inundaciones, o también como resultado de un terremoto o erupción volcánica. Arrastra consigo limo, arena, rocas, entre otras cosas. Puede viajar, sin aviso, varios kilómetros desde su origen y a una gran velocidad. En su recorrido puede aumentar de tamaño a medida que arrastra árboles, basura, e incluso vehículos. Uno de los grandes problemas que presentan los aluviones es que no se pueden predecir, se desatan sin aviso. Por lo tanto es importante tomar ciertas precauciones en caso de que un aluvión se presente. Los aluviones siempre se originan en los mismos lugares, por lo tanto aquellos lugares deben tener planes de evacuación que al menos tenga dos rutas de escape.
La vegetación debe ser plantada baja en laderas y es importante construir muros de retención. También podría ser ventajoso construir canales para dirigir el flujo alrededor de edificios. Una vez desatado el aluvión, es posible tomar medidas antes que llegue a la zona, pues se escucha un sutil murmullo que cada vez más comienza a incrementar; comienza a salir agua en la superficie del suelo; las rejas árboles, postes se mueven sin cesar; aparecen grietas en las casas; entre otras cosas más. Una vez tomado conciencia de que el aluvión estalló y en pocos minutos va a llegar a la zona en cuestión se debe cortar inmediatamente el suministro de gas, luz y agua.
HUAYCOS
El Huayco conocido también como “lloclla” o aluvión, es una corriente o flujos muy rápidos de aguas turbias, lodo, cargados de piedras, maleza y/o árboles que se desplazan a lo largo de un cauce definido de quebradas o riachuelos. Su causa directa son las fuertes lluvias o precipitaciones pluviales, que ocurren durante la temporada lluviosa.
Un río es una corriente de agua continua o perenne, intermitente o no, que desemboca en el mar, en otro río (afluente), o en un lago (emisor), o se pierde en el terreno (endorreísmo).
Como modelador de relieve es el agente geológico más importante.
La energía de una corriente es su capacidad para realizar un trabajo que particularmente consiste en la remoción de fragmentos de rocas, de sedimentos sueltos y de material en solución.
Cuando una corriente tiene una gran cantidad de energía es un agente de la erosión; cuando tiene poca energía es agente de depositación y cuando tiene energía moderada que le permite arrastrar su carga es una corriente graduada.
EROSIÓN
La erosión hídrica o erosión fluvial es el proceso de sustracción de masa sólida al suelo o a la roca de la superficie por un flujo de agua.
a) Erosión en lámina
El agua de lluvia al escurrir en forma laminar por la superficie del suelo a través de las pendientes, arranca una capa fina y uniforme de toda esa superficie como si fuera una lámina.
Es la forma más peligrosa de erosión hídrica ya que esta pérdida, al principio es casi imperceptible sólo será visible con el paso del tiempo cuando se aprecie erosión en mayor intensidad dando origen a surcos y posteriormente en cárcavas
b) Arranque hidráulico
El agua al presionar contra las grietas de las rocas, comprime el aire que contienen y rompe a las rocas en grandes bloques. Las márgenes suaves de los cauces son minadas.
c) Abrasión
Es la acción y efecto de desgastar por fricción. La corriente de agua lleva partículas y fragmentos, que por así decir, son las herramientas para desgastar las rocas que encuentra y éstas a su vez son también desgastadas.
d) Corrosión o disolución
La acción disolvente de las aguas depende del tipo de roca por la que atraviesa la corriente y de las sustancias que contienen en solución. Las Calizas y Dolomías son susceptibles a la corrosión por aguas cargadas de CO2, que al reaccionar con ellas forma ácido carbónico que ataca al CaCO3 de las mencionadas rocas formando bicarbonato de Calcio, que es sumamente inestable y soluble en el agua.
TRANSPORTE
Las corrientes transportan su carga por rodadura o tracción, solución, suspensión y flotación
a) Rodadura o tracción
Los fragmentos grandes angulosos o sub angulosos son transportados en el fondo dado su peso y tamaño son empujados por la corriente y los de menor tamaño son rodados. Los fragmentos más pequeños pueden moverse dando saltos.
Dependiendo de la distancia de recorrido, estos fragmentos de roca, terminan siendo de forma redondeada o sub redondeados, sea cual fuera su tamaño, por esta razón se les denominan “cantos rodados”.
b) Suspensión
Por su tamaño, las partículas del tamaño de la arena, limo y arcilla son transportados como “carga suspendida” en la corriente; por lo general, estas partículas son las que le dan el color turbio al agua, constituyen además las “herramientas” con que pulen y desgastas a las rocas cuando chocan con ellas.
c)Solución
Por su capacidad de disolverse ante el agua, las sales minerales, entre otros, son transportadas en forma de disolución y representa una importante fracción de la carga total. Cuando el agua es utilizada en la agricultura, le proporciona este tipo material incrementando la fertilidad del suelo, como: iones Na+, Cl-, K+, Ca2+
d) Flotación
Por la baja densidad de algunos fragmentos de roca, especialmente de origen volcánico como la piedra pómez y otros, son transportados por el agua en flotación. También van en esta situación, los materiales orgánicos.
DEPOSITACIÓN
El material transportado por la corriente de agua, llega a su destino, cuando las condiciones que permitieron transportar son invertidas, entonces la corriente deposita esta carga.
La depositación ocurre por la ocurrencia de las siguientes situaciones:
- Declinación en la pendiente, reducción de la velocidad de la corriente, disminución del caudal, o por combinación de éstas.
Los depósitos del material transportado por las corrientes, lo hacen durante su trayecto o al final del mismo, siguiendo una secuencia estratificada; es decir, los depositan conforme van llegando, una tras otras, que con el transcurrir del tiempo, permiten identificarlas como tales, entre otras geoformas aluviales se presentan a las siguientes:
- Abanicos aluviales, terrazas aluviales, deltas aluviales, playones aluviales, islas aluviales, depósitos aluviales, fondos de valle, entre otros.
FORMACIÓN DE VALLES
Los torrentes forman su propio cauce realizando un trabajo de profundización inicialmente y posteriormente de ensanche. En este ensanchamiento intervienen muchos procesos: la erosión y socavamiento de las orillas y los flancos con los consecuentes derrumbes y deslizamientos, descomposición química y transporte de los materiales, entre otros tipos de remoción.
La formación de este cauce origina lo que llamamos valle, y sus dimensiones dependen del caudal, del tipo de roca que atraviesa la corriente y del tiempo que ha transcurrido en su elaboración.
Formación de terrazas aluviales
Luego de un proceso de evolución, que puede durar algunos cientos de años, se forma las terrazas aluviales.
a) Erosión del sustrato rocoso
El río:
Primero labra su cauce sobre la roca de sustrato, sucede la erosión vertical y encajamiento del canal, gana importancia la erosión areolar en los interfluvios, con lo que logra rebajar el relieve hasta formar un amplio valle, y luego rellena el valle formando la llanura aluvial.
b) Erosión de los depósitos aluviales
El río:
Gana capacidad erosiva y se encaja en su propia llanura aluvial, puede llegar o no a atravesar todo el espesor de los depósitos aluviales.
c)Niveles de terraza aluvial
El río:
Amplía el valle al ganar importancia la erosión en sus márgenes, la superficie de la anterior llanura aluvial queda adosada a las márgenes del valle en forma de escalón o resalte topográfico que constituye la denominada terraza aluvial.
d) Colmatación del valle
El río:
colmata o rellena el valle formando una nueva llanura aluvial, el río se encaja para dar origen a otro nivel de terraza.
Se repite el ciclo, esta vez da origen a terrazas más modernas. En esta nueva llanura aluvial (y por tanto las terrazas que pueda formar) se encuentran a un nivel topográficamente inferior respecto a las terrazas más antiguas.
Las terrazas dibujadas aquí, donde el río no ha eliminado por completo el depósito aluvial anterior, se llaman encajadas. Sin embargo, puede ocurrir que el río atraviese totalmente el aluvión llegando a encajarse en el sustrato rocoso, formando las terrazas escalonadas y solapadas.
CICLOS Y TIPOS DE EROSIÓN
Los rasgos morfológicos que se desarrollan en un paisaje dependen fundamentalmente de tres factores:
la estructura y composición de las rocas, los procesos geológicos que actúan sobre éstas, el desarrollo de los agentes de erosión.
Una corriente nueva pasa durante su desarrollo por una secuencia continua de cambios morfológicos que constituyen su “Ciclo Erosivo” ó “Ciclo Geomórfico”. Sus etapas son tres bien definidas: Juventud, Madurez y Senectud. Cabe anotar que este proceso trae como consecuencia la modificación del paisaje regional que no siempre avanza con la misma rapidez que el ciclo fluvial; esto es, un paisaje en juventud puede estar atravesado por corrientes maduras.
a)Juventud fluvial
Una corriente joven erosiona activamente; corta hacia abajo predominantemente, dejando cañones con márgenes acantiladas El perfil típico es en forma de “V”. El agua llena parcial o totalmente el angoste cauce. Son características la formación de rápidos y cascadas y el perfil longitudinal es irregular, con fuertes pendientes.
b) Madurez fluvial
Esta etapa se caracteriza por el aumento de la erosión lateral y el inicio de acumulaciones de Planicie de Inundación en un valle bien definido y amplio. La pendiente es moderada, eliminándose por consiguiente los rápidos y cascadas. Se produce un equilibrio entre la erosión y la depositación de sedimentos y las irregularidades desvían la corriente de lado a lado, originándose los meandros y la depositación de sedimentos en la llanura de inundación. El paisaje de Madurez Regional se caracteriza por un gran desarrollo de tributarios y una topografía escabrosa.
c)Senectud fluvial
A medida que se reduce la pendiente, la corriente pierde gran parte de su poder rosivo en profundidad, mas no así el lateral, produciéndose en consecuencia deposición. Este tipo de corrientes se caracteriza por el gran desarrollo de meandros y una amplia llanura de inundación en un valle también amplio y poco profundo. Los meandros se agudizan y adquieren forma de horquilla, que puede ser estrangulada al romper la corriente el angosto cuello; así se convierte en un lao arqueado que posteriormente puede convertirse en un pantano. El paisaje regional Senil se caracteriza por tener pocos tributarios y la no existencia de colinas altas. El resultado final es la formación de una superficie plana llamada “Penillanura”.
PERTURBACIONES EN EL CICLO DE EROSIÓN
El ciclo normal de erosión puede ser perturbado, en cualquier etapa de su desarrollo, al intervenir diversos fenómenos naturales, como los siguientes:
- Diastrofismo, vulcanismo, glaciación, acción eólica, drenaje subterráneo, y cambios climáticos que pueden acelerar el ciclo o repetir parte de él.
- El diastrofismo al producir un levantamiento del terreno con relación al nivel del mar, aumenta la pendiente y consecuentemente proporciona mayor energía a la corriente.
A este proceso se le denomina rejuvenecimiento y se caracteriza por el inicio de un nuevo ciclo de erosión.
ACCIDENTES EN EL CURSO DE UN RÍO
El agua de los ríos discurre de las zonas elevadas a las más bajas, impulsada por la fuerza de la gravedad. En su caída, el agua arranca y arrastra materiales de los terrenos por los que pasa. Estos materiales se van depositando en función de su tamaño y de la corriente del río.
a) Cañones: Las corrientes veloces producidas por la fuerte pendiente que corren sobre terrenos áridos y de roca infrayacente dura, excavan su perfil en forma de un valle estrecho y profundo con paredes casi verticales a los que se les llama Cañones o Gargantas. En los ríos del Perú, generalmente en la selva, se les denomina Pongos. Podemos citar como ejemplos el Cañón del Pato formado por el río Santa y el Pongo de Manseriche formado por el río Marañón.
b) Cascadas y cataratas: Las cascadas son saltos de agua que se producen en el lecho de un río donde existe un brusco desnivel, o pendiente muy abrupta por una fractura del terreno o falla geológica. También se deben a la alternancia de materiales duros con otros menos resistentes.
Cuando estos saltos de agua tienen un volumen grande se les denomina cataratas.
En los antiguos valles fluviales, típicamente maduros se observa nuevos cortes en forma de “V”, dejando generalmente terrazas en ambas márgenes. Si el paisaje es meandriforme, la corriente rejuvenecida mantendrá el patrón produciéndose los llamados meandros encajados.
c) Rápidos: Son saltos de agua constituidos por una serie de peldaños por los que el agua corre con gran rapidez, formando en algunos casos remolinos.
Una de las formas que se originan los rápidos es debido a que al pie de las cascadas y cataratas, el agua cae con fuerza, produciendo remolinos que excavan la base. Se forma así un entrante en la base de la cascada, mientras que en la parte superior se crea una cornisa. Esta termina por derrumbarse, de forma que se nivela la cascada y desaparece: en este tramo, el río sigue discurriendo con mayor velocidad, originando el mencionado rápido.
d) Meandros: Un meandro es una curva descrita por el curso de un río cuya sinuosidad es pronunciada.
Se distinguen dos tipos de meandros: Meandros de Valle –meandros encajados– y Meandros de Llanura Aluvial –de llanura de inundación–.
Se forman con mayor facilidad en los ríos de las llanuras aluviales con pendiente muy escasa, dado que los sedimentos suelen depositarse en la parte convexa del meandro, mientras que en la cóncava, debido a la fuerza centrífuga, predomina la erosión y el retroceso de la orilla.
e) Marmitas: Conocidas también como “marmitas de gigantes”, son huecos casi circulares que se encuentran en el fondo y en los lados rocosos del cauce de algunos ríos.
Se inicia con un incipiente pulido que puede deberse a remolinos que da lugar a pequeñas depresiones superficiales y semimetricas a veces menores de 50 cm de profundidad y 50 cm de diámetro.
Una vez formadas continúan agrandándose por acción rotativa del agua y pequeños fragmentos de roca actuando como “molinos de abrasión natural”. Una vez alcanzada la profundidad critica, sigue la erosión lateral, desarrollándose bordes angulosos en las partes altas de los huecos.